Neutrosophic Computing and Machine Learning, Vol. 28, 2023
Alexandra P. Abata E, Ronny J. Imbaquingo A, Karen G. Morales P, Richard S. Collaguazo P. Análisis estadístico
neutrosófico sobre los factores asociados con la automedicación de la población adulta joven de la parroquia
Santa Martha de Cuba
falta de actividad física, entre otros); 2) naturaleza del profesional de salud (p. ej. ceder ante la presión de los pa-
cientes que exigen vender fármacos sin receta médica); 3) naturaleza del sistema de salud (p. ej. insuficiencia en
la prestación de servicios los sistemas de salud pública, los altos costos de los servicios de salud privados, la
inaccesibilidad, la distribución no regulada de medicamentos, entre otros); 4) publicidad (medios audiovisuales
tradicionales o redes sociales) [3-24-25], [4]¸ [5]
En relación con este último, Lescure, Paget, Schellevis y Van Dijk [3-25-26] sostienen que, aun cuando di-
versos países disponen de una amplia gama de leyes y regulaciones nacionales para reducir el uso no frecuente
de medicinas sin prescripción médica, la mayoría de los determinantes previamente mencionados no son fáciles
de combatir, lo que hace que la automedicación sea un problema persistente.
En lo que respecta a las causas de la automedicación, Hughes, McElnay y Fleming [6] citado por Montastruc
y otros [4], sostienen que la causa central por la cual se recurre a la automedicación corresponde al tratamiento
de patologías consideradas ''menores'', en particular: dolor, fiebre, estreñimiento, tos, estados gripales, trastornos
digestivos, entre otros.
En tal sentido, los fármacos más comunes empleados en la automedicación se incluyen: analgésicos, antipi-
réticos, antiácidos, antidiarreicos, antibióticos, vitaminas, pomadas para la piel, entre otros. [7-26-27]
Tomando en consideración el fenómeno de la automedicación en América Latina, se destaca el estudio lleva-
do a cabo por Escobar-Salinas & Ríos-González [8], los cuales buscan determinar la frecuencia de la automedi-
cación en adultos de once ciudades de Latinoamérica desde junio de 2015 a enero de 2016. En este sentido, los
resultados del estudio sostienen que el 50,2% de las personas que se automedican tenían un nivel académico uni-
versitario, al tiempo que, el 54,6% se ha automedicado en las últimas 2 semanas, y el 62,6% en los últimos 3 me-
ses. Adicionalmente, el 50,3% de las personas entrevistadas afirman que se automedican debido a que no dispo-
nen de tiempo para ir al médico. En conclusión, la práctica de la automedicación en América Latina es común,
puesto que más de la mitad de la población opta por dicha práctica, considerando que la falta de tiempo es la
principal causa de dicha práctica [8-26-27]
En otros estudios, el grupo DURG-LA de la Unidad de Farmacología del Centro de Biomedicina de la Uni-
versidad Central de la Ecuador, detenta un estudio sobre la automedicación en América Latina, en el cual desta-
can los fármacos más consumidos en la región, estos son:
• Analgésicos (16,8%)
• Antibióticos (7,4%)
• Antiinflamatorios (5,9%)
De los datos previamente mencionados, se desprende, obviamente, que los fármacos más consumidos por los
latinoamericanos son los de venta libre (OTC). En este sentido, se concluye que, en la región, la seguridad de su
libre venta y libre consumo está siendo bastante cuestionada (15).
Ahora bien, en el ámbito local, Gómez [9] investiga los factores de riesgo que inciden en la automedicación
de los adultos mayores en Santa Martha de Cuba-Carchi-Ecuador. Del estudio se desprende la conclusión de que
el grupo de adulto mayor, en especial el paciente crónico, es el que se encuentra más propenso a transgredir la si-
tuación de la automedicación, debido a su condición de salud, el hecho de estar obligados a tomar numerosos
medicamentos y sufrir dolencias propias de la edad, es el que le da el carácter de población en riesgo de autome-
dicarse. Ahora bien, los resultados del levantamiento de información sugieren que el 47,5% acude directamente a
la farmacia para la obtención de medicamentos sin receta médica, el 85% nos indica haberse automedicado, y
haber utilizado analgésicos, el 86%indica que no lee las instrucciones del uso del medicamento,32% ha tenido
efectos como náusea, vómito y diarrea entre otras molestias, por otro parte el 80% de la población encuestada no
conoce los riesgos de la automedicación [9-27-28].
La automedicación, cuando es adecuada, puede conllevar diversos beneficios, entre estos: alivio para el pa-
ciente, concesión de un papel activo al paciente en su propio cuidado de la salud, y la reducción de la carga de
los gobiernos en el gasto en salud en torno al tratamiento de condiciones de salud menores [10-27-28].
Sin embargo, la automedicación está lejos de ser una práctica completamente segura, de hecho, la magnitud
de los riesgos es ampliamente superior que los beneficios. En efecto, la automedicación es un factor de riesgo de
interés farmacológico, clínico y de salud pública; los riesgos potenciales incluyen: emergencias accidentales,
reacciones adversas intencionales o por sobredosis; autodiagnóstico incorrecto, interacciones farmacológicas pe-
ligrosas, dosificación incorrecta, enmascaramiento de una enfermedad grave, y riesgo de dependencia y abuso
[10], [11-28-29]
En línea con las estadísticas internacionales, se advierte que la automedicación es una forma común de aten-
ción médica practicada en la mayor parte del mundo, con más del 50% de fármacos comprados y utilizados sin
receta [5-29-30]. En efecto, los datos formulados por Baboo y Chouhan [12] afirman que, en América del Sur, el
porcentaje de personas que se automedican corresponde al 15%, es decir, 15 de cada 100 personas sudamerica-
nas se administran medicación sin prescripción médica.
En lo que respecta al ámbito nacional, se pone en evidencia que en Ecuador la prevalencia de personas que se
automedican equivale al 24,3% (2 de cada 10 ecuatorianos se automedican), de los cuales, el 51,2% obtuvo in-
formación acerca de estos medicamentos del farmacéutico, el 37,7% por conocimiento propio, y el 7,0% por un